Esta nueva década podría marcar el inicio de la maduración definitiva de las inversiones verdes o ecoresponsables, es decir, aquellas destinadas a financiar iniciativas empresariales y tecnológicas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente.
Cada vez son más quienes, a la hora de comprar acciones, miran con lupa que las empresas en las que se disponen a invertir cuenten con un enfoque verde claro. Este fenómeno se da con más fuerza entre las nuevas generaciones de inversores y, por suerte para el planeta, parece irreversible. Va en la línea de una preocupación creciente por parte de los inversores sobre las políticas de responsabilidad social corporativa de las grandes empresas.
Además, en nuestros días van creciendo las voces que exigen un cambio de paradigma en el tejido empresarial mundial que tenga en cuenta los enormes desafíos a nivel de sostenibilidad que amenazan el equilibrio del planeta (cambio climático, consumo de usar y tirar, gestión de residuos plásticos, contaminación, consumo de recursos hídricos, etcétera).
En definitiva, los inversores muestran una preferencia cada vez mayor por aquellas compañías que adoptan medidas responsables con el medio ambiente. Y es que, incluso desde un punto de vista puramente basado en los beneficios económicos, existe una clara relación positiva entre rentabilidades y políticas ecorresponsables: los llamados fondos verdes se han situado entre los más rentables del año pasado.
Los inversores muestran una preferencia cada vez mayor por aquellas compañías que adoptan medidas responsables con el medio ambiente.
Las administraciones públicas tampoco se quedan atrás: el ejemplo de Talavera
La ciudadanía no se limita a exigirles a las empresas un cambio con respecto a sus políticas ecológicas, también les demandan un cambio de chip a sus administraciones públicas. A nivel local, el Ayuntamiento de Talavera de la Reina se encuentra trabajando en proyectos que buscan dar respuesta a estas inquietudes ciudadanas.
A continuación, reseñaremos brevemente dos de los más importantes en los que trabaja actualmente la corporación municipal y que están cosechando buenos resultados.
– Life INTEXT: inversión y progreso para Talavera, con acento sostenible
El gobierno local talaverano está apostando por un ambicioso proyecto de gestión de agua, Life INTEXT, auspiciado por Aqualia y enmarcado dentro de la hoja de ruta marcada por el Ejecutivo local.
Talavera acogerá una planta pionera en el tratamiento de aguas residuales que tiene potencial para revolucionar un proceso tan delicado para el medio ambiente como este, en el que cualquier problema se deja sentir pronto con fuerza (pensemos en una fuga, por ejemplo).
La apertura de esta nueva planta en el marco del proyecto Life INTEXT atraerá nuevas inversiones y contribuirá también al despegue tecnológico regional.
– Línea Verde: inversión en un portal para resolver incidencias medioambientales locales
Otra iniciativa medioambiental exitosa auspiciada por el Ayuntamiento de Talavera es Línea Verde, un portal destinado a la resolución de incidencias relacionadas con el medio ambiente. Cualquier ciudadano que lo desee puede hacer una consulta o notificar cualquier eventualidad, así como acceder a un mapa de incidencias abiertas, desde cualquier navegador web.
También ofrece recursos útiles para mejorar la concienciación ecológica (guía de buenas prácticas, enlaces de interés, glosario ambiental) y presenta con claridad las ordenanzas municipales medioambientales. Por último, cuenta con una sección en la que se recogen las principales noticias locales en esta materia. Se trata de un intento por parte de las autoridades locales de centralizar en un único punto el acceso a los recursos medioambientales de Talavera.
Apuesta por la sostenibilidad
En resumen, como acabamos de ver, la nueva década recién estrenada reúne todos los ingredientes para convertirse en la década de la apuesta definitiva por la sostenibilidad. Por una parte, el propio estado del planeta hace que ya no sea una cuestión opcional o de preferencia. Por otra, tanto los inversores como los ciudadanos se han vuelto más exigentes con los agentes económicos y políticos.
Todo apunta a que el mundo se prepara para afrontar el gran reto histórico de nuestra época: revertir los estragos del cambio climático.
Fuente: La Voz de Talavera