La digitalización tiene un potencial enorme como palanca para la descarbonización de la Administración Pública, que debe además asumir un papel ejemplar en la asunción de criterios ambientales y contribuir al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030.
La Administración pública actúa como palanca de las grandes transformaciones y motor de transformación del conjunto de la economía. Es un dinamizador del crecimiento y la innovación. La situación excepcional generada por la pandemia de la Covid-19 ha puesto de manifiesto la urgencia y necesidad de desarrollar una Administración digital que pueda responder a las necesidades de los ciudadanos y ciudadanas de una forma más ágil y efectiva.
El reto es así, desarrollar unos servicios públicos digitales más inclusivos, eficientes, personalizados, proactivos y de calidad para ciudadanos, ciudadanas y empresas.
La Agenda España Digital 2025 recoge el impulso de la digitalización de la Administración Pública entre los diez ejes de reforma e inversión. El objetico es catalizar una transformación digital que relance el crecimiento económico, la reducción de desigualdades, el aumento de la productividad y el aprovechamiento de todas las oportunidades que brindan las nuevas tecnologías.
Para generar sinergias de las transiciones digital y ecológica, esta transformación debe llegar a toda la sociedad y permitir conciliar las nuevas oportunidades que ofrece el mundo digital con el respeto a los valores constitucionales y europeos, así como la protección de los derechos individuales y colectivos.
El Plan de Digitalización de las Administraciones Públicas supone un salto decisivo en la mejora de la eficacia y eficiencia de la Administración Pública, en la transparencia y eliminación de trabas administrativas. Una automatización de la gestión y mayor orientación a la personalización de servicios y a la experiencia de usuario, así como actuando de elemento catalizador de la innovación tecnológica de nuestro país desde el ámbito público.
El Plan de Digitalización de las Administraciones Públicas pretende lograr los siguientes objetivos:
–Servicios digitales, accesibles, eficientes, seguros y fiables: Desarrollar servicios públicos digitales más inclusivos, eficientes, personalizados, proactivos y de calidad para para la ciudadanía.
–Políticas públicas basadas en datos y modernización de la gestión de datos: Transformar a la Administración Pública española en una Administración más moderna y “guiada por datos”, donde la información de los de los ciudadanos, de las ciudadanas y de las Administraciones Públicas se utiliza eficientemente para diseñar políticas públicas alineadas con la realidad social, económica y territorial de España, así como para la construcción de una experiencia ciudadana de los servicios públicos verdaderamente innovadora.
–Democratización del acceso a las tecnologías emergentes: Permitir desarrollar servicios, activos e infraestructuras comunes que permitan a todas las Administraciones sumarse a la revolución tecnológica que está suponiendo la irrupción de nuevos habilitadores tecnológicos como pueden ser la Inteligencia Artificial o la tecnología de analítica de datos.
Todo ello debería permitir mejorar la calidad de las políticas públicas y el servicio a la ciudadanía, adaptándolos a las necesidades específicas de los ciudadanos y ciudadanas y llegar, gracias a los servicios y entornos digitales, a garantizar la misma calidad y oferta de servicios en todo el territorio, contribuyendo así a la vertebración territorial y a la lucha contra la despoblación.
El plan, permitirá avanzar hacia una Administración del Siglo XXI incluyendo reformas e inversiones que mejorarán tanto los procesos y procedimientos administrativos como las competencias digitales y los recursos disponibles. Modernizar de forma integrada las administraciones públicas para que puedan mejorar la atención a la ciudadanía y contribuir activamente al éxito de las políticas públicas destinadas a las grandes transformaciones de España (transformación digital, transformación medioambiental, cohesión social y cohesión territorial) apoyándose, entre otras herramientas, en el teletrabajo.
Cuenta con una planificación anual hasta 2025 estructurándose en tres ejes estratégicos:
Eje 1. Transformación digital de la Administración General del Estado (AGE)
Eje 2. Proyectos de alto impacto en la digitalización del Sector Público
Eje 3. Transformación Digital y Modernización del Ministerio de Política Territorial y Función Pública, Comunidades Autónomas y Entidades Locales
Para el despliegue del Plan, se prevé una financiación de 2.600 millones de euros en el periodo 2021-2023, de los que 992 millones de euros (38,1%) están previstos en el Presupuesto para 2021, que se plasmará a través de 17 medidas o proyectos de inversión:
España cuenta con una buena posición de partida para impulsar la administración digital por la inversión en la digitalización de las administraciones públicas en los últimos años y ha situado nuestro país en la segunda posición del Índice de Digitalización de la Economía y la Sociedad (DESI) en 2019.
Sin embargo, este impulso legislativo y de inversión, la relación digital con los ciudadanos y ciudadanas se caracteriza por ser transaccional, atomizada, generalista y no personalizada. Algo que dificulta el acceso a las políticas, ayudas y servicios públicos de las Administraciones por parte de los colectivos objetivo de las mismas, especialmente aquellos más vulnerables y el acceso de las empresas a los procedimientos digitales de relación con la administración (compra pública, subvenciones, información fiscal, etc.) es todavía fragmentado y costoso, dificultando el acceso especialmente para las PYMEs.
Así el Plan de Digitalización de las Administraciones Públicas es una oportunidad para construir la Administración del s.XXI.