La Comisión Europea ha propuesto un plan para que Europa sea independiente de los combustibles fósiles rusos mucho antes de 2030, empezando por el gas, teniendo en cuenta la invasión rusa de Ucrania. Este plan expone una serie de medidas para responder al aumento de los precios de la energía en Europa y reconstituir las reservas de gas.
La nueva realidad geopolítica y del mercado de la energía nos exige acelerar drásticamente la transición hacia una energía limpia y aumentar la independencia energética de Europa frente a proveedores poco fiables y unos combustibles fósiles volátiles.
Tras la invasión de Ucrania, la necesidad de una rápida transición hacia una energía limpia es más acuciante y evidente que nunca.
La UE importa el 90 % del gas que consume, y Rusia aporta más del 45 % de dichas importaciones, en grado variable según los Estados miembros. El 25 % de las importaciones de petróleo y el 45 % de las de carbón también proceden de Rusia.
El arsenal de medidas sobre precios de la energía de la Comisión, de octubre de 2021, ha ayudado a los ciudadanos y las empresas a soportar los elevados precios de la energía en los últimos meses. Veinticinco Estados miembros han adoptado medidas acordes con la caja de herramientas, con lo que ya están bajando las facturas de energía de más de setenta millones de clientes domésticos y varios millones de microempresas y pequeñas y medianas empresas.
La eliminación progresiva de nuestra dependencia de los combustibles fósiles procedentes de Rusia puede conseguirse mucho antes de 2030. Para ello, la Comisión propone crear un plan REPowerEU, que aumente la resiliencia del sistema energético a escala de la UE sobre dos pilares:
–diversificar el suministro de gas mediante mayores importaciones de GNL y gasoductos no procedentes de proveedores rusos,
-aumentar el volumen de producción e importación de biometano e hidrógeno renovable;
–reducir más rápidamente el uso de combustibles fósiles en nuestros hogares, edificios, industrias y sistema energético, impulsando la eficiencia energética, aumentando las energías renovables y la electrificación, y resolviendo los cuellos de botella de las infraestructuras.
La plena aplicación de las propuestas de la Comisión «Objetivo 55» ya reduciría nuestro consumo anual de combustibles fósiles en un 30 %, lo que equivale a 100 000 millones de metros cúbicos, de aquí a 2030.
Gracias a las medidas del plan REPowerEU, podríamos eliminar al menos 155 000 millones de metros cúbicos de uso de gases fósiles, lo que equivale al volumen importado de Rusia en 2021. Casi dos tercios de esta reducción pueden lograrse en el plazo de un año, con lo que se pondría fin a la excesiva dependencia de la UE de un único proveedor.
La Comisión se propone colaborar con los Estados miembros con el fin de determinar los proyectos más adecuados para alcanzar estos objetivos, basándose en el amplio trabajo ya realizado con los planes nacionales de recuperación y resiliencia.
La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, en la presentación del Plan ha declarado: «Debemos ser independientes del petróleo, el carbón y el gas rusos. Sencillamente, no podemos confiar en un proveedor que nos amenaza de manera explícita. Tenemos que actuar ahora para mitigar el impacto del aumento de los precios de la energía, diversificar nuestro suministro de gas para el próximo invierno y acelerar la transición hacia una energía limpia. Cuanto más rápido adoptemos las energías renovables y el hidrógeno, combinado con una mayor eficiencia energética, más rápido seremos verdaderamente independientes y controlaremos nuestro sistema energético. A finales de esta semana, debatiré las ideas de la Comisión con los dirigentes europeos en Versalles y después trabajaré para aplicarlas rápidamente con mi equipo».
Por su parte, el vicepresidente ejecutivo para el Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans, ha declarado lo siguiente: «Ha llegado el momento de resolver nuestros puntos vulnerables y de ser más independientes en nuestras opciones energéticas. Pasemos a las energías renovables a la velocidad del rayo. Las energías renovables son una fuente de energía barata, limpia y potencialmente infinita y, en lugar de financiar la industria de los combustibles fósiles en otros lugares, crean empleo aquí. La guerra de Putin en Ucrania demuestra la urgencia de acelerar nuestra transición hacia una energía limpia».
Más información: REPowerEU