La Comisión ha adoptado el informe sobre prospectiva estratégica de 2022, titulado «Hermanamiento de las transiciones digital y ecológica en el nuevo contexto geopolítico». El informe identifica diez ámbitos de acción clave con el objetivo de maximizar las sinergias y la coherencia entre nuestras ambiciones climáticas y digitales. La UE quiere reforzar su resiliencia intersectorial y su autonomía estratégica abierta, y estará mejor preparada para hacer frente a los nuevos retos mundiales de aquí a 2050.
Las transiciones ecológica y digital ya ocupaban un lugar destacado en la agenda política de la Comisión establecida por la presidenta Von der Leyen en 2019. A arzíz de la guerra de Ucrania, Europa está acelerando su asunción del liderazgo mundial en materia climática y digital en políticas clave, desde la energía y la alimentación hasta la defensa y las tecnologías de vanguardia.
Desde esta perspectiva, el informe sobre prospectiva estratégica de 2022 presenta un análisis holístico y orientado al futuro de las interacciones entre las dos transiciones, teniendo en cuenta el papel de las tecnologías nuevas y emergentes, y los principales factores geopolíticos, sociales, económicos y reglamentarios que configuran su hermanamiento, es decir, su capacidad para reforzarse mutuamente.
Tecnologías esenciales hasta 2050
Las tecnologías digitales ayudan a la UE a lograr la neutralidad climática, reducir la contaminación y restaurar la biodiversidad. Pero su uso generalizado está aumentando el consumo de energía, al tiempo que genera más residuos electrónicos y una mayor huella ambiental.
La energía, el transporte, la industria, la construcción y la agricultura, — los cinco mayores emisores de gases de efecto invernadero de la UE —, son fundamentales para el éxito del hermanamiento de las transiciones ecológica y digital.
Las tecnologías desempeñarán un papel clave en la reducción de la huella de carbono de estos sectores. De aquí a 2030, la mayor parte de las reducciones de las emisiones de CO2 provendrán de tecnologías disponibles en la actualidad. Sin embargo, la consecución de la neutralidad climática y la circularidad de aquí a 2050 será posible gracias a las nuevas tecnologías que se encuentran actualmente en fase experimental, de demostración o de prototipo.
En el sector de la energía, los nuevos sensores, los datos por satélite y la cadena de bloques podrían contribuir a reforzar la seguridad energética de la UE, mejorando la previsión de la producción y la demanda de energía, evitando perturbaciones relacionadas con las condiciones meteorológicas o facilitando los intercambios transfronterizos.
En el sector del transporte, una nueva generación de baterías o tecnologías digitales, como la inteligencia artificial y el internet de las cosas, permitirá cambios importantes hacia la sostenibilidad y la movilidad multimodal en los diferentes sistemas de transporte, e incluso en la aviación de corta distancia.
En todos los sectores industriales, los gemelos digitales (una contrapartida virtual de un objeto o proceso físico, utilizando datos en tiempo real y el aprendizaje automático) podrían ayudar a mejorar el diseño, la producción y el mantenimiento.
En el sector de la construcción, la modelización de la información sobre edificios podría mejorar la eficiencia energética e hídrica, afectando a las opciones de diseño y al uso de los edificios.
Por último, en el sector agrícola, la informática cuántica, combinada con la bioinformática, puede mejorar la comprensión de los procesos biológicos y químicos necesarios para reducir los plaguicidas y los fertilizantes.
Factores geopolíticos, sociales, económicos y reglamentarios
El hermanamiento entre políticas climáticas y digitales exigirá asimismo que el modelo económico de la UE se centre en el bienestar, la sostenibilidad y la circularidad. La posición de la UE en la definición de normas mundiales desempeñará un papel importante, mientras que la equidad social y la agenda de capacidades serán una de las condiciones para el éxito, junto con la movilización de la inversión pública y privada.
Se prevé que se necesitarán anualmente casi 650 000 millones de euros en inversiones adicionales con visión de futuro hasta 2030.
Diez ámbitos de actuación clave
El informe identifica ámbitos en los que es necesaria una respuesta política para maximizar las oportunidades y minimizar los riesgos potenciales derivados del hermanamiento:
- Reforzar la resiliencia y la autonomía estratégica abierta en sectores críticos para la doble transición a través, por ejemplo, del trabajo del Observatorio de Tecnologías Críticas de la UE, o de la política agrícola común para garantizar la seguridad alimentaria.
- Intensificar la diplomacia ecológica y digital, aprovechando el poder regulador y de normalización de la UE, promoviendo al mismo tiempo los valores de la UE y fomentando las asociaciones.
- Gestionar estratégicamente el suministro de materiales y productos básicos críticos, adoptando un enfoque sistémico a largo plazo para evitar una nueva trampa de la dependencia.
- Reforzar la cohesión económica y social reforzando, por ejemplo, la protección social y el Estado del bienestar, en el que las estrategias de desarrollo regional y la inversión desempeñarían también un papel importante.
- Adaptar los sistemas de educación y formación a la rápida transformación de la realidad tecnológica y socioeconómica, y apoyar la movilidad laboral en todos los sectores.
- Movilizar inversiones adicionales con visión de futuro en nuevas tecnologías e infraestructuras, y en particular en I+i y sinergias entre el capital humano y la tecnología, con proyectos transnacionales clave para la puesta en común de recursos de la UE, nacionales y privados.
- Desarrollar marcos de seguimiento para medir el bienestar más allá del PIB y evaluar los efectos habilitadores de la digitalización y su huella global de carbono, energética y ambiental.
- Garantizar un marco reglamentario con visión de futuro para el mercado único que propicie modelos de negocio y patrones de consumo sostenibles, por ejemplo, reduciendo constantemente las cargas administrativas, actualizando nuestro conjunto de instrumentos políticos en materia de ayudas estatales o utilizando la inteligencia artificial para respaldar la elaboración de políticas y el compromiso de los ciudadanos.
- Reforzar un enfoque global para establecer normas y beneficiarse de la ventaja de la UE como pionera en la sostenibilidad competitiva, centrada en el principio de «reducir, reparar, reutilizar y reciclar».
- Promover una ciberseguridad sólida y un marco seguro de intercambio de datos para garantizar, entre otras cosas, que las entidades críticas puedan prevenir, resistir y recuperarse de las perturbaciones y, en última instancia, generar confianza en las tecnologías vinculadas a la doble transición.
Más información: Strategic Forensic Report , informe sobre prospectiva estratégica de 2022, «Hermanamiento de las transiciones digital y ecológica en el nuevo contexto geopolítico»