El impacto del cambio climático en las ciudades: preparémonos para un schock climático 1 603

resiliencia climática

Un estudio de la Universidad Politécnica de Zurich ha analizado el impacto del cambio climático en 520 ciudades del mundo y si su clima en 2050 se parecerá más a sus propias condiciones climáticas actuales o a las condiciones actuales de otras ciudades en diferentes regiones bioclimáticas. La conclusión, en 2070 el 77% de las ciudades tendrá el clima que tiene hoy una ciudad que se encuentre a mil kilómetros más al sur de su posición geográfica actual, un verdadero shock climático.

Es difícil imaginar para la mayoría de las personas el impacto de un calentamiento adicional de 2 °C del planeta y cómo podría afectar la vida diaria, por lo que el estudio intenta acercar y comunicar el impacto del calentamiento global y combatir las interpretaciones erróneas sobre este fenómeno global.

La historia ha demostrado repetidamente que los datos y los hechos por sí solos no inspiran a los humanos a cambiar sus creencias o actuar para prevenir los efectos del cambio climático. El aumento de la información científica disponible no tiene correlación con la aceptación del impacto del cambio climático y la toma de medidas de mitigación y adaptación para combatirlo.

Sabemos gracias a la neurociencia la importancia de los marcos mentales para generar conciencia real del problema con un enfoque más proactivo para acelerar un cambio de comportamiento. Hay que ilustrar y tangibilizar el impacto que tendrá la no acción y establecer estrategias consensuadas para combatirlo.

Las ciudades pueden servir como análogos climáticos útiles, lo que permite a las personas visualizar su propio futuro climático a través de la comparación con otras ciudades que actualmente experimentan esas condiciones climáticas

En ese sentido, el uso de los posibles ‘cambios geográficos de ciudades’ o lo que se denomina estudios “análogos de ciudades”, puede ayudar a comprender y visualizar los efectos del cambio climático. Las ciudades pueden servir como análogos climáticos útiles, lo que permite a las personas visualizar su propio futuro climático a través de la comparación con otras ciudades que actualmente experimentan esas condiciones climáticas.

Hasta ahora, la investigaciones existentes se habían centrado en análisis a escala regional o continental ( América del Norte o Europa) pero carecíamos de una perspectiva global. Las tendencias regionales aputan a que es probable que las ciudades se parezcan a las de latitudes más bajas a medida que el clima continúa calentándose. No está claro si esta tendencia se mantiene a escala mundial, ya que otros factores climáticos, como los cambios en los regímenes de precipitaciones pueden alterar estas tendencias latitudinales.

Las ciudades tropicales o del hemisferio sur en las que ya existen condiciones cálidas, es probable que experimenten cambios considerables en las precipitaciones y variaciones climáticas extremas y pueden mostrar cambios geográficos independientes bajo condiciones climáticas cambiantes. 

Es importante generar una visión global y unificada de los cambios en las condiciones climáticas de las ciudades del mundo para visualizar los impactos del cambio climático en cualquier región biogeográfica y evaluar qué ciudades actuales se parecerán más a las condiciones climáticas de las ciudades futuras. Para abordar las limitaciones anteriores, el estudio explora patrones a escala global utilizando 19 variables bioclimáticas que incluyen la variabilidad climática y la estacionalidad además de los promedios climáticos.

De los resultados del estudio podemos extraer algunas previsiones claras:

Es muy probable que el 77 % de las ciudades del futuro experimenten un clima más cercano al de otra ciudad existente que a su propio clima actual. Además, El 22% de las ciudades experimentarán condiciones climáticas que actualmente no experimentan las principales ciudades existentes.

Como tendencia general, todas las ciudades tienden a moverse hacia los climas de ciudades situadas en el subtrópico, con ciudades del hemisferio norte cambiando a condiciones más cálidas, en promedio ~1000 km al sur (velocidad ~20 km.año) y ciudades de los trópicos cambiando a condiciones más secas.

Las ciudades en las latitudes del norte experimentarán los cambios más dramáticos en condiciones de temperatura extrema. En Europa, tanto los veranos como los inviernos serán más cálidos, con aumentos promedio de 3,5 °C y 4,7 °C, respectivamente.

 El clima de Madrid en 2050 se parecerá al clima de Marrakech hoy, Estocolmo se parecerá a Budapest, Londres a Barcelona, ​​Moscú a Sofía, Seattle a San Francisco, Tokio a Changsha. 

Las ciudades de las regiones tropicales experimentarán cambios menores en la temperatura promedio en relación con las latitudes más altas. Sin embargo, los cambios en los regímenes de lluvia dominarán las ciudades tropicales con un aumento de los eventos extremos de precipitación (+5% de lluvia en el mes más húmedo) como por la severidad e intensidad de las sequías (-14% de lluvia en el mes más seco). La consecuencia es que con sequías más severas, las ciudades tropicales se moverán hacia los subtrópicos, es decir, hacia climas más secos.

Se viene un verdadero schock climático para las ciudades que nos interpela a preprarlas para ser mucho más resilientes.

Acceso al informe completo

Previous ArticleNext Article

1 Comment

  1. Pingback: godues

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *