
El informe del Instituto de Investigación de Capgemini, ”Navegar por la incertidumbre con confianza – Prioridades de inversión para 2025” sugiere que, en un contexto de continua incertidumbre en el entorno de mercado, los líderes empresariales son positivos con respecto a las perspectivas de su organización. Un optimismo que está impulsando un aumento de la inversión, especialmente en la experiencia del cliente, las cadenas de suministro y la sostenibilidad, para permitir una mayor innovación, eficiencia, competitividad y creación de resiliencia.
El informe revela que los líderes empresariales se sienten más confiados sobre el año que viene que hace 12 meses: el 62% es optimista sobre las perspectivas de su organización para 2025, 6 puntos porcentuales más que en la misma fecha del año pasado y 20 desde 2023. Sin embargo, los directivos tienen más confianza en sus propias organizaciones que en el mercado global en general, con un 37% de aquellos con más esperanzas sobre las perspectivas del entorno operativo global en los próximos 12-18 meses, sólo ligeramente por encima del año pasado.
En el incierto entorno actual del mercado, el 56% espera dar prioridad a la reducción de costes sobre el crecimiento de los ingresos para 2025. Pero los directivos son conscientes de que este cambio requiere inversión: la mitad afirma que su organización tiene previsto aumentar la inversión global en 2025, mientras que algo menos de una cuarta parte prevé niveles de inversión más bajos en comparación con 2024, y el resto no espera ningún cambio.
Experiencia del cliente, la innovación y cadenas de suministro más inteligentes
Gran parte de la confianza de los líderes empresariales sigue centrándose en la experiencia del cliente, seguida de la ingeniería, la I+D y la innovación, con casi 8 de cada 10 y casi tres cuartas partes de los ejecutivos planeando ahora aumentar la inversión en estas áreas, respectivamente.
Sin embargo, la mayor aceleración de la inversión se centra en la transformación de la cadena de suministro, donde el 63% afirma que aumentará su gasto en 2025 -frente a menos de la mitad en 2024- y en un 9,4% de media. Las cadenas de suministro de nueva generación integrarán IA e IoT para mejorar la eficiencia, reducir los residuos y respaldar los objetivos de sostenibilidad de las empresas, así como para mejorar la toma de decisiones y reducir los costes en general.
A nivel mundial, 7 de cada 10 ejecutivos están preocupados por el impacto del aumento de los aranceles y las disputas comerciales bilaterales en la competitividad de su organización. A casi dos tercios también les preocupa el impacto de una posible guerra comercial mundial en las operaciones de su organización y el acceso al mercado. En este sentido, los ejecutivos de Japón y China son los más preocupados por el aumento de los aranceles y los conflictos comerciales bilaterales, y los menos por una posible guerra comercial mundial.
Para aminorar estos riesgos y reforzar su capacidad de resiliencia, la mayoría de las empresas de todo el mundo están diversificando sus fuentes de aprovisionamiento o recurriendo al “friendshoring” (contratación de proveedores en países amigos o cercanos geográficamente). Casi 3 de cada 4 ejecutivos ya están reduciendo el riesgo de sus cadenas de suministro mediante la inversión en otros países emergentes para reducir la dependencia de China, frente a menos de la mitad el año pasado. Paralelamente, casi dos tercios de ellos confirman ahora que el “friendshoring” representará una parte significativa de las estrategias de aprovisionamiento y producción de su organización en 2025 (frente al 45% del año pasado).
La tecnología climática prioridad en la inversión en sostenibilidad
En un contexto en el que la inversión en sostenibilidad se considera cada vez más un motor de valor empresarial, así como un activo para el cumplimiento y la eficiencia, y cada vez más afectada por la geopolítica, el 62% de los ejecutivos (10 puntos porcentuales más que en 2024) tiene previsto aumentar sus presupuestos de sostenibilidad, un 10,5% de media.
Las áreas prioritarias son la tecnología climática (el 72% de los ejecutivos prevé gastar más), incluidos el hidrógeno, las energías renovables, las baterías, la energía nuclear y la captura de carbono. Las baterías se consideran la principal inversión en tecnología climática en 2025, ya que más de la mitad de los directivos las sitúan entre las tres primeras, en particular los fabricantes y las empresas automovilísticas, seguidas de la energía solar. Además de la tecnología climática, las otras áreas en las que se invertirá más en sostenibilidad son I+D y el desarrollo de productos sostenibles, la protección y restauración de la biodiversidad, y la conservación y gestión del agua.
Para leer el informe completo: https://www.capgemini.com/insights/research-library/investment-trends-2025